Hacer ejercicio cuando hace calor puede ser peligroso, sobre todo si hay mucha humedad.
Por eso, es importante seguir algunos consejos para evitar sufrir un golpe de calor o una enfermedad relacionada con el calor.
Las horas más calurosas del día son entre las 10 de la mañana y las 3 de la tarde.
Durante este tiempo, las temperaturas son más altas y la humedad es mayor, lo que hace que sea más difícil para el cuerpo enfriarse.
La ropa holgada, ligera y de colores claros te ayudará a mantenerte fresco. Los colores oscuros absorben el calor, por lo que es mejor evitarlos.
Una gorra o sombrero te ayudará a proteger tu cabeza del sol, y unas gafas de sol te protegerán los ojos.
Si el calor es constante, es una buena idea aclimatar tu cuerpo al calor haciendo un entrenamiento ligeramente más corto o más fácil durante una o dos semanas.
Es importante mantenerse hidratado cuando hace calor. Bebe agua con regularidad, incluso si no tienes sed.
Deja de entrenar si te sientes mal, tienes calambres musculares, náuseas, vómitos, debilidad, fatiga o dolor de cabeza.
Ten cuidado si estás teniendo sudoración excesiva, mareos, confusión, irritabilidad, problemas visuales o aumento del ritmo cardíaco.