Si has sido víctima de una violación o agresión sexual, es importante que recibas atención médica lo antes posible.
Busca ayuda de una enfermera especialmente formada para atender a víctimas de agresión sexual (SANE).
Ella podrá realizar un examen forense de agresión sexual, que puede ayudar a las fuerzas del orden a identificar al agresor y a obtener pruebas para un posible juicio.
Si es posible, intenta no hacer nada que pueda eliminar las pruebas de la agresión.
Si ya has hecho alguna de estas cosas, no te preocupes. Aún puedes someterte a un examen forense.
Lleva una muda de ropa para después del examen. Si te has cambiado de ropa, lleva lo que llevabas puesto durante la agresión en una bolsa.
Tienes derecho a detener, pausar u omitir parte del examen forense.
También puedes tener un abogado presente durante todo el examen.
No tienes que denunciar la agresión a la policía para someterte a un examen forense, un SANE puede explicarte tus opciones de denuncia y las leyes estatales pertinentes.
Los exámenes forenses son gratuitos en todo el país, según la ley federal.