Desde Octubre, Israel ha incrementado su opresión en el territorio.
El Gobierno de Netanyahu bombardea escuelas, hospitales y zonas residenciales. También asesina a civiles, la gran mayoría niños y niñas.
Aunque es cierto que países como España o Bélgica han condenado la muerte de civiles, la Unión Europea y Estados Unidos defienden y califican de legítimo el derecho de Israel a defenderse tras los atentados de Hamás.