49 fieles mormones fueron tratados por intoxicación de monóxido de carbono en Utah, mientras estaban en la iglesia.
La iglesia mormona, situada en Monroe, dijo que 49 de los 54 asistentes fueron tratados.
Los afectados manifestaron falta de aire y dolores de cabeza, y 22 fueron hospitalizados, según la Oficina del Sheriff.
Los bomberos locales descubrieron altos niveles de gas venenoso, que la iglesia atribuyó a un fallo en el sistema de calefacción.
En un comunicado de la iglesia se afirma que "estamos preocupados por el bienestar de todos los afectados y rezamos por su recuperación".
Añadía que la iglesia está "trabajando para sufragar los gastos médicos y de otro tipo" de los afectados.