Seguramente ya no les sorprenda, pero, por reincidencia, toca contarlo. Y es que (sí, otra vez) volvieron a saltar chispas en el salón del Pleno del Palacio de Cibeles. Y (sí, otra vez) subió la temperatura por cuestiones de la política nacional. Y (sí, otra vez) Reyes Maroto volvió a pedir a palabras acogiéndose al artículo 78, es decir, por alusiones. Desde el segundo punto del día, recién amanecida la sesión, hasta el epílogo, con esa reprobación final (tras moción de urgencia) a Pedro Sánchez por no haber dado su voto a Madrid como sede de la Agencia Europea contra el Blanqueo de Capitales y la Financiación del Terrorismo (AMLA), la jornada apenas dejó de hervir.