Un hombre australiano entró en los libros de récords con una declaración oficial de Guinness World Records por tener los pies más grandes de todo el mundo, se trata de Peter Iroga de Sydney quien tiene su pie derecho de 36.5 centímetros de largo, mientras que el izquierdo es de 37.5, lo cual es un centímetro más largo que el poseedor del récord mundial anterior.
Iroga dice que no hay una tienda con zapatos tan grandes para él y no encuentra comodidad en ningunos otros, por ello una clínica médica de calzado en Sídney decidió asumir el reto. En el lugar se le fabricaron un tenis color blanco quedándole adecuados y cómodos, convirtiéndose así en un verdadero alivio para Igory.
Los zapatos tardaron 30 horas en ser fabricados, pero cumplieron con las expectativas del hombre de 2 metros y 23 centímetros.