Lo que se planeó inicialmente como una manifestación pacífica "Ocupar Roma" la protesta se convirtió en una manifestación violenta en la capital italiana. Informó que la policía utilizó gas lacrimógeno y cañones de agua para dispersar a las multitudes de italianos enojado. Los manifestantes llevaban máscaras y cascos lanzaron piedras, botellas y otros objetos contra la policía antidisturbios.