El maquinista del tren Alvia que se estrelló en Santiago de Compostela, se ha negado a declarar ante la Policía, acogiéndose a su derecho a no hacerlo, según han informado fuentes de la investigación.
El conductor no ha querido contestar al interrogatorio policial en el Hospital Clínico de Santiago en el que permanece ingresado debido a que también resultó herido en el accidente.
Miembros de la Brigada de Policía Judicial han acudido al hospital donde está custodiado para tomarle la primera declaración como imputado, pero el conductor ha decidido acogerse a su derecho constitucional a no declarar.
Fuentes policiales han afirmado que ya se preveía que esta iba a ser la actitud que adoptaría el conductor a la hora de ser interrogado por los agentes.
El conductor fue detenido el jueves en el hospital en el que permanece ingresado imputado por "imprudencia", según ha explicado el jefe superior de la Policía de Galicia, Jaime Iglesias.
Iglesias ha indicado que Francisco José Garzón está "imputado por un hecho delictivo vinculado a la autoría del siniestro" y que la declaración policial se puede producir "en cualquier momento", mientras que la judicial podría tener lugar incluso en el centro hospitalario donde permanece detenido.
El jefe policial ya indicó que se tomaría declaración al maquinista "a la mayor brevedad", en el momento en que su situación médica lo permitiese.El detenido puede pasar a disposición judicial en el mismo hospital.
Las fuentes consultadas no han podido precisar por el momento cuándo será puesto a disposición judicial, aunque todo hace prever que será el sábado.