La tarde del miércoles se amotinaron 23 migrantes centroamericanos de origen hondureño en el Centro de Detención Migratoria del Instituto Nacional de Migración (INM), que se localiza en la garita de la zona centro de Mexicali, Baja California.
Los reportes del cuerpo de bomberos de la capital del estado mencionan que los centroamericanos quemaron un colchón y realizaron algunos destrozos en el inmueble.
Autoridades de los tres niveles de gobierno y el ejército desplegaron un operativo para controlar la situación, mientras que elementos del H. cuerpo de bomberos sofocaban las llamas y ventilaban la zona, con le fin de evitar que pudiera haber intoxicados por el humo.
El INM confirmó que una vez controlada la emergencia, los migrantes fueron llevados a certificar médicamente, con el objetivo de cerciorarse que estén bien de salud.
Mencionaron que al interior del centro de detención se encontraban 23 adultos y 3 menores de edad, quienes habían sido llevados a las instalaciones migratorias porque habían sido reportados por sus propios compañeros migrantes como problemáticos, ya que estaban viviendo en la calle, fumando marihuana y causando problemas.
Este grupo de centroamericanos serán trasladados al centro de detención migratoria de Tijuana, ya que las instalaciones de Mexicali están dañadas al punto de que no pueden permanecer en el lugar.
El INM mencionó que todos ellos son solicitantes de refugio en México, por lo que será la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (COMAR) la que determine si son o no deportados a su país de origen.