La central nuclear ucraniana de Zaporiyia, la mayor de Europa, ha sido alcanzada en la noche del jueves por disparos de misiles y proyectiles de tanques del Ejército ruso. El ataque ha generado un peligroso incendio que podría haber causado una catástrofe nuclear en suelo europeo. El presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, ha acusado a Moscú de "terrorismo nuclear". Sin embargo, según Rusia, el incidente ha sido fruto de una "provocación" de un grupo de sabotaje ucraniano.

"El 4 de marzo, cerca de las 2.00 de la madrugada (...) una patrulla rusa fue objeto de un ataque de un grupo de sabotaje ucraniano. Con el objetivo de provocar el fuego contra el edificio, los efectivos fueron atacados desde las varias ventanas del centro de formación de la central", ha explicado el portavoz del Ministerio de Defensa ruso, Igor Konashenkov.

Konashénkov ha añadido que los militares rusos respondieron al ataque de "los saboteadores ucranianos" y que estos iniciaron el incendio en su retirada. "El objetivo de la provocación del régimen de Kiev en esta instalación nuclear radicó en el intento de acusar a Rusia de crear una fuente de contaminación radiactiva", ha declarado. Según Konashénkov, las tropas rusas controlan la ciudad de Energodar y la central nuclear desde el pasado 28 de febrero.