El PSOE ha celebrado este sábado su Comité Federal más atípico de los últimos años en medio de un clima de convulsión ante la posibilidad de que Pedro Sánchez anuncie el lunes que dimite, lo que nadie duda de que sea un escenario factible. La plana mayor del partido y los barones territoriales han exhibido una defensa cerrada al líder ausente entreverada de críticas a "la derecha y la ultraderecha" por tratar de "destruirlo" mientras en la calle Ferraz de Madrid unas 12.500 personas -según datos de la Delegación del Gobierno- se han concentrado para pedir que se quede.