El jefe militar filipino exigió el miércoles a China que devuelva los fusiles y otros equipos incautados por la guardia costera china en un disputado banco de arena y que pague por los daños causados en un asalto que comparó con un acto de piratería en el Mar de China Meridional.

Personal chino a bordo de más de ocho lanchas motoras embistieron repetidamente y luego abordaron las dos lanchas neumáticas de la armada filipina el lunes para impedir que el personal de la armada filipina transfiriera alimentos y otros suministros, incluidas armas de fuego, a un puesto de avanzada territorial filipino en Second Thomas Shoal, que también es reclamado por Pekín, según funcionarios filipinos.

Tras una refriega y repetidos choques, los chinos se apoderaron de las embarcaciones y las dañaron con machetes, cuchillos y martillos.

También se apoderaron de ocho fusiles M4, que estaban embalados en maletas, equipos de navegación y otros suministros e hirieron a varios miembros de la armada filipina, uno de los cuales perdió el pulgar derecho, según dijeron el martes a The Associated Press dos funcionarios de seguridad filipinos.