El Sena y la calidad de sus aguas continúan siendo un quebradero de cabeza para los organizadores de los Juegos Olímpicos de París. Esta vez, las abundantes lluvias del viernes y el sábado han obligado que se cancelen los entrenamientos de triatlón, las primeras pruebas que estaba previsto que se disputaran en el principal río de la capital francesa.
En la madrugada del sábado al domingo, el comité organizador de los Juegos, la Unión Internacional de Triatlón y las autoridades locales tomaron la decisión conjunta de cancelar estos primeros entrenamientos. Una decisión que han formalizado en un comunicado oficial en el que indicaron que "los niveles del agua no ofrecen las garantías suficientes" para preservar la salud de los deportistas.