Las heridas que sufrió Mateo, el pequeño de 11 años asesinado en Mocejón (Toledo) el pasado domingo cuando jugaba al fútbol, son compatibles con el cuchillo hallado días después en las proximidades de la casa del padre del joven detenido como presunto autor de los hechos.
Por ello, según han indicado a EFE fuentes próximas a la investigación, el cuchillo se ha mandado al Instituto de Medicina Legal para que haga las comparaciones pertinentes, ya que es "muy compatible con las heridas" a la espera de confirmación de las pruebas.