El presidente Javier Milei convocó a una asamblea legislativa para defender su propuesta económica, pero enfrentó una baja participación y un notable descenso en la audiencia televisiva. La reacción entre los gobernadores fue mixta, con algunos dispuestos a aceptar ajustes presupuestarios del 10%, mientras otros exigieron el pago de deudas pendientes. La medida ha generado tensiones tanto dentro del gobierno como con sus aliados políticos.