Israel continuó el viernes los bombardeos contra líderes de Hizbulá en los suburbios de Beirut, donde aseguró haber matado el responsable de la unidad de comunicaciones del grupo chií, y destruyó la carretera hacia el principal paso fronterizo con Siria, mientras en Irán el líder Ali Jameneí, fusil en mano, encabezaba por primera vez en cuatro años la oración del viernes para honrar al asesinado líder de la milicia libanesa, Hasán Nasrala.