En el norte de Botswana existe un paraíso en el que la fauna salvaje florece gracias a las aguas del río Chobe, pero en la estación seca muchos de los animales libran una batalla diaría contra el calor abrasador, incluidas tres de las familias más emblemáticas de Africa. Aunque no podrían ser más diferentes, todas comparten un objetivo sacar adelante a sus pequeños, pero en Chobe la infancia es una época de vulnerabilidad y de aprendizaje y la única forma de sobrevivir es con la orientación de la familia.