He aquí algunas formas de ahorrar dinero secando la ropa en casa.  

 Da a tu ropa un ciclo de centrifugado extra.  
 Después de un lavado, es posible que quieras poner tu máquina en otro ciclo de centrifugado para deshacerte de cualquier exceso de humedad.  

 Utiliza un deshumidificador.  
 Cuando hay demasiada agua en el aire, la ropa no se seca correctamente y huele a humedad.  

 Los deshumidificadores extraen el exceso de humedad del aire y ayudan a evitar la condensación y los problemas de humedad.  

 Seca la ropa con una toalla antes de colgarla.  
 Envolver la ropa en una toalla es una forma muy eficaz de eliminar el exceso de agua y ahorrar tiempo de secado.  

 Dobla la toalla a lo largo y coloca la ropa a lo largo del borde superior, luego enróllala bien.  
 Utiliza perchas para que circule mejor el aire.  

 En lugar de colocar la ropa en capas en el tendedero, prueba a colgar algunas. Esto puede ayudarte a meter más ropa y acelerar el proceso de secado al crear una buena ventilación.