Durante su reciente presentación en Miami durante el Eras Tour, Taylor Swift tuvo que lidiar con un incidente en el que se le desabrochó el vestido mientras interpretaba “But Daddy I Love Him”. Afortunadamente, uno de sus bailarines, Kam, salvó el momento y evitó un desastre en el escenario. El inesperado problema se resolvió rápidamente, lo que permitió a Swift continuar con su espectáculo sin interrupciones.