El ciclo vital de la garrapata se inicia con un huevo que se convierte en larva, una larva que pasa a ninfa y esta ninfa que se convierte en forma adulta, diferenciándose en macho y en hembra. Todas estas fases pueden pasar en uno, dos o hasta tres hospedadores distintos, pero las garrapatas que parasitan al perro normalmente suelen ser de dos y tres. Así por ejemplo, una garrapata de tres hospedadores, sería una larva que parasita a una roedor, se alimenta de el un tiempo para caer al suelo y convertirse en ninfa, que igualmente buscara a otro hospedador como el conejo, que se alimentara de el y también caerá al suelo y pasara a ser ya una garrapata adulta, ésta subirá a su tercera victima que puede ser el perro y allí existirá una fecundación de las hembras, que buscaran un lugar fuera del animal para poner sus huevos. Su estructura consta de un cuerpo ovalado con unos apéndices largos que varían entre seis y ocho según la fase, que le permiten subir fácilmente a su hospedador, y también tiene un potente aparato bucal que se adhiere a la piel de estos fijamente, incluso su glándula salival secretan una sustancia parecida al cemento que todavía la fija mas.