El Ministerio de Justicia denunció el funcionamiento de un boliche clandestino en un espacio cedido a la Universidad de las Madres de Plaza de Mayo. Sin embargo, la universidad desmintió tener control sobre el inmueble desde 2019, alegando que solo lo ocuparon durante 2018 y que no cumplía con los requisitos para su uso educativo. La polémica surge tras un allanamiento realizado por la Policía Federal Argentina.