En un reciente intercambio que ha captado la atención de muchos, se han revelado detalles íntimos sobre la vida personal del actor Luciano Castro. Griselda, su actual pareja, ha sido mencionada en un tono que mezcla humor y crítica. La conversación gira en torno a las dinámicas familiares y las relaciones pasadas de Castro, destacando una aparente falta de compromiso con sus responsabilidades paternales. La fuente del relato expresa su frustración por la conducta repetitiva del actor en sus relaciones amorosas y cuestiona su imagen pública como "gran hombre". A pesar de los rumores sobre posibles reconciliaciones, se afirma con firmeza que no hay interés en retomar una relación con él. Este relato ofrece una mirada cruda a las complejidades emocionales detrás de las figuras públicas y cómo sus acciones personales pueden contrastar con sus imágenes públicas.