En Bolivia, el gobierno ha denunciado que ciertos sectores empresariales están manipulando los precios de los alimentos con fines políticos. Según las autoridades, esta estrategia busca crear la percepción de que el país enfrenta una grave crisis económica y una creciente inflación. El Ejecutivo sostiene que estas alzas en los precios no responden a factores económicos reales, sino que son parte de un intento deliberado por desestabilizar al gobierno y generar descontento social.teleSUR