Irán e Israel están inmersos en una guerra abierta que se intensificó con un ataque aéreo israelí a instalaciones nucleares y fábricas de misiles en Teherán, utilizando más de 50 aviones y misiles hipersónicos. El objetivo fue debilitar la capacidad militar iraní.
Al mismo tiempo, Donald Trump dejó clara la postura proisraelí de EE. UU. y declaró saber dónde está el "líder supremo de Irán", el ayatolá Ali Jamenei, en un mensaje en su red social Truth Social. "Es un blanco fácil, pero está seguro allí. No vamos a sacarlo (¡matarlo!), al menos no por ahora", escribió Trump, lo que ha generado preocupación por una posible intervención directa de Washington en el conflicto.