Ellas son Sor Bernadette, Sor Regina y Sor Rita, tres octogenarias que llevan toda una vida dedicada a la enseñanza en un convento de los Alpes austriacos.

En 2022 el convento pasó a ser parte de un monasterio agustino. De toda una hermandad, solo quedaban ellas.

Por eso, a finales de diciembre de 2023 fueron trasladadas a un centro de mayores en contra de su voluntad.

Mantenían vivo su espíritu aventurero y con la ayuda de varias exalumnas consiguieron escapar. Se toparon con las cerraduras cambiadas, pero ni eso pudo con su objetivo: volver a su hogar.

Ahora viven a su manera y lejos de que su edad las incapacite, traspasan barreras generacionales compartiendo su día a día en sus redes sociales.