En la producción del sombrero volteao, tradicional colombiano, el trabajo es mucho y el pago bajo, además los únicos que se enriquecen son comerciantes e intermediarios como el hijo del ex presidente Álvaro Uribe, denuncian artesanos indígenas de Tuchín, quienes laboran jornadas enteras con concimientos que se transmiten de generación en generación. teleSUR