Primero fue la retirada de su obra 'A mi manera de hacer', después vino su hospitalización como consecuencia de una crisis de ansiedad, ahora, el motivo es bien distinto. Andrés Pajarés volvió a la palestra por culpa de otro de sus numeritos. En esta ocasión, fue más allá. El actor fue detenido hace pocos días como consecuencia de su intervención en un despacho de abogados. Vestido con un disfraz y cuyos complementos eran una pistola de mentira y un spray antivioladores, Pajares dio muestras de que algo falla en su mundo particular.