El viernes se conoció el informe oficial de las Naciones Unidas respecto a los incidentes ocurridos en la flotilla turca en el año 2010, en el que 9 activistas turcos murieron en un enfrentamiento con soldados de las fuerzas de defensa israelíes.
Según el informe, las maniobras defensivas llevadas a cabo por Israel fueron lícitas, sin embargo ante el veredicto, el gobierno de Turquia manifestó su oposición, solicitando nuevamente una disculpa al gobierno hebreo y una compensación para los familiares de las víctimas.
Por su parte el primer ministro Binyamin Netanyahu anunció que, si bien lamenta profundamente lo hechos, no se disculpará nuevamente, ya que los soldados de las fuerzas israelíes simplemente ejercieron su derecho básico en proteger a sus ciudadanos.