La neuroteología es una rama de la neurociencia que estudia el componente neurológico de las experiencias religiosas. Se han descubierto patrones electromagnéticos de la actividad cerebral que son activados por ciertas costumbres, como la meditación, o por otros métodos, como la inducción de impulsos electromagnéticos al cerebro, las sustancias psicodélicas e, incluso, la modificación genética. La neuroteología investiga ahora si es posible integrar de manera artificial las experiencias religiosas en nuestras vidas. El científico Andrew Newberg de la Universidad de Pennsylvania estudió los cerebros de monjes franciscanos y budistas dedicados a la meditación descubriendo que en ellos había una mayor actividad en el lóbulo frontal (asociado con la concentración y la atención), mientras que el lóbulo parietal, vinculado con la información sensorial, tenía escasa actividad en estas personas.