Manolo Preciado ha recibido un sentido y emotivo homenaje en el que fuera su estadio durante años. El Molinón acogió una multitudinaria misa con 9.000 personas en recuerdo del fallecido técnico cántabro. El capellán del Sporting, Fernando Fueyo, ofició el acto, en el que el sportinguismo volvió a demostrar su cariño por Preciado, fallecido el 7 de junio. Una canción de Pipo Prendes fue el momento de mayor emoción de la misa.