El banco holandés ING suprimirá 1.700 empleos en los próximos tres años al reunificar sus plataformas de información telefónica en el país. Otros 1.075 puestos de asalariados externos serán eliminados. Las supresiones se producirán principalmente en su sede central. Actualmente, ING posee tres sistemas diferentes en función de que se atienda para asuntos generales, para sus aplicaciones en los teléfonos móviles o para su página de internet.
Paralelamente, la entidad holandesa invertirá doscientos millones de euros para poner en marcha el nuevo sistema telefónico. Una inversión con la que le debe ahorrar 270 millones al año a partir de 2018.