La sonda espacial europea envió una última foto diez segundos antes de estrellarse contra el cometa Churyúmov-Gerasimenko. Un éxito celebrado en la Agencia Espacial Europea tras el desplome programado, el punto final de la misión Rosetta. La primera vez que una sonda desciende sobre un cometa. Han sido doce años de recogida de datos para saber cómo se formó nuestro sistema solar.
Rolf Densing, director de Operaciones de la Agencia Espacial Europea lo celebró desde el centro de control en Darmstadt, Alemania: “Como director de operaciones y jefe del Centro Europeo de Operaciones Espaciales me siento muy orgulloso de nuestros equipos que han sacado todo esto adelante. Ha sido estupendo. Y nada mejor para combatir la depresión que mirar al frente. Hay vida más allá de Rosetta. Con todo lo grande que fue. Otra misión aterrizará en Marte el 19 de octubre “.
El pequeño módulo laboratorio de aterrizaje Philae fue el primero en posarse en 2014 sobre un cometa, uno de los más primitivos del sistema solar.
Rosetta sobrevoló tres veces la Tierra, una Marte y tres veces el Sol. Han sido seis mil millones de kilómetros recorridos en doce años. Entre la información recopilada: nuevos elementos sobre cómo evitar que un cometa impacte sobre la tierra y acabe con todo rastro de vida.