Este domingo, la visita sorpresa a Iraq del presidente de los EEUU, George Bush, ha concluido con más tensión de la esperada cuando un periodista ha arrojado al dirigente sus zapatos en plena rueda de prensa, junto al primer ministro iraquí Nouri Al Maliki. Al grito de "toma tu beso de despedida, pedazo de perro", el reportero le ha lanzado los zapatos, uno detrás del otro, a Bush. Los agentes de seguridad iraquíes y los del servicio secreto estadounidense se han echado inmediatamente encima del hombre. Ninguno de los zapatos alcanzó su objetivo, uno de ellos fue esquivado por el propio presidente, que aseguró para tranquilizar a los presentes que el incidente no le había molestado.