Se acabó lo de que el cliente siempre tiene la razón. Muchos huéspedes destrozan hoteles y casas rurales, lo que ha llevado a crear una red social con una lista negra de clientes. Más de 700 establecimientos ya se han adherido a este programa de vigilancia hotelera. Servirá a los empresarios como archivo informativo para poder vetar la admisión a clientes marcados como problemáticos.