José Enrique Abuín apodado como "El Chicle" vive junto a su mujer y su hija en Rianxo. Él es uno de los sujetos más señalados por la policía como posible responsable de la desaparición de Diana Quer, la joven madrileña que desapareció en un municipio cercano en agosto de 2016. La coartada que aportó entonces le había mantenido al margen legal del caso, pero la noche de Navidad se produjo un suceso que va a facilitar las investigaciones de la Guardia Civil.El martes 26 de diciembre una joven interpuso una denuncia en Boiro, el municipio contiguo a Rianxo. La noche anterior un hombre intentó robarle el móvil intimidándola con un cuchillo y trató de introducirla en el maletero de un vehículo. Ella reconoció en una fotografía a "El Chicle" como al autor del asalto. El viernes por la mañana la policía detuvo al sospechoso junto a su mujer. Él está acusado de tentativa de secuestro e intento de robo y ella está acusada de prestarle coartada.La UCO y la Comandancia de La Coruña nunca dejaron de trabajar en el caso de Diana Quer pese a que estaba archivado desde abril por falta de avances. La Guardia Civil había conseguido reconstruir recientemente el recorrido de José Enrique Abuín la noche de la desaparición de Diana Quer gracias a su teléfono móvil y situaron, sin ninguna, duda su vehículo en el punto en el que desapareció. Su casa está a menos de tres km del lugar donde apareció el teléfono móvil de la joven. Ahora, las muestras de ADN que puedan obtener de sus vehículos, entre ellos el Alfa Romeo, pueden ser claves para la investigación.En estas últimas semanas las autoridades seguían apuntalando pruebas contra El chicle, pero debían hacer una vigilancia no invasiva. Los investigadores tenían previsto solicitar la reapertura del caso la primera semana de enero. No tenían prisa y seguían trabajando en una reconstrucción que les llevase al punto en el que pudo deshacerse del cadáver. Sin embargo, con lo sucedido el pasado lunes, todo se ha precipitado.