Se puede decir más claro, pero no más alto.
Felipe González no se para en barras a la hora de criticar la decisión de Pedro Sánchez de suscribir un pringoso pacto con el prófugo de la Justicia española Carles Puigdemont.
El político que hasta la fecha más legislaturas ha completado en el Palacio de La Moncloa (1982-1996), en una entrevista en el programa 'La Noche', del Canal NTN24, aseveró que todo se había acordado por la única cuestión de que a Sánchez le faltaban siete votos para poder ser investido:
No estoy entrando en un debate jurídico, estoy diciendo que las posiciones de mi partido han sido estas. ¿Del 23 al 24 de julio qué pasó? Lo único que pasó es que faltaron siete votos y siete votos no pueden tener el coste de destruir los fundamentos de un ordenamiento jurídico de una democracia plena.
El histórico dirigente del PSOE consideró un error meter en el debate la cuestión de la amnistía porque le resulta de todo punto intolerable pedir perdón a quienes han cometido unos delitos tan graves como atentar contra la unidad territorial:
Muchos ciudadanos siguen pensando que la amnistía es el perdón, que es como los indultos. La amnistía no es perdonar, es pedir perdón a los que cometieron los delitos, es decir que nuestro sistema es ilegítimo, e ilegítimos son sus comportamientos y sus aspiraciones. Eso me parece intolerable.
Y a los que alegan que Felipe González intenta imponer como postura oficial lo que es una visión personal, el expresidente de Gobierno recuerda lo obvio, que su posición era la que venían sosteniendo en público los prebostes del PSOE:
Esa es mi posición personal y hay otros muchos que la comparten. Ahora se puede ver como personal, pero si miran a los últimos cinco meses era la posición de la totalidad de los dirigentes de mi partido, sin excepción.