Con un mensaje contundente y transversal, referentes de la justicia, la Iglesia Católica y organismos públicos vinculados a la defensa de los derechos de las infancias se reunieron para expresar un claro rechazo al proyecto de ley enviado por el Poder Ejecutivo para bajar la edad de punibilidad en la Argentina. Fue en el encuentro “Más derechos sociales, menos cárcel para los pibes”, realizado por el Comité Panamericano de Juezas y Jueces por los Derechos Sociales y la Doctrina Franciscana (COPAJU) y el Instituto Fray Bartolomé de las Casas (IFBC). Entre las conclusiones del encuentro se acordó que "hay una demagogia punitiva que quiere poner a los chicos y a las chicas como enemigos sociales”.
A su turno, la defensora General de la Nación comenzó por citar a Luis Niño, quien dijo que “el sistema penal es una trampa para cazar niños”. Stella Martínez definió al proyecto como “una suma de mentiras” donde “lo mediático tuvo mucho que ver”, al crear “la falsa idea de que la seguridad está en peligro por los terribles delitos que cometen los adolescentes”.
Remarcó que “son falsas las estadísticas que se usaron”, que se tomaron datos enviados por los juzgados nacionales solo de la Ciudad de Buenos Aires, donde “la mayoría son hechos mínimamente lesivos de delitos contra la propiedad”, y que además “cotejan la actualidad con la pandemia, donde claro que hubo mucho menos casos porque la gente no salía a la calle”. Por eso, concluyó, “son cifras construidas de manera perversa y sobre esa base quieren hacer una ley de reforma penal juvenil”.