Pese a que su precio aumenta por debajo del índice de inflación general y de otros productos alimenticios, el consumo de carne bajó fuertemente en lo que va de 2024 y se desploma a su peor nivel en 26 años. Esta caída histórica se suma a una producción en descenso y refleja una crisis estructural en el mercado local.
En los primeros nueve meses del año, es decir, durante la gestión de Javier Milei, el consumo interno de carne vacuna disminuyó en comparación con el mismo período del año anterior, alcanzando 1.646 millones de toneladas de res con hueso en lo que va del año.
En el móvil estuvo Agustina Binotti.