Han pasado 38 años desde la Guerra de Yom Kippur, donde fuerzas sirias y egipcias lanzaron un ataque sorpresa coordinado contra Israel, durante las fiestas judías más sagradas y solemnes, el Día de Expiación, este año el pueblo judío recordó nuevamente a los soldados caídos en batalla, a través de una ceremonia en el cementerio militar del Monte Herzl, que contó con la participación de altos funcionarios gubernamentales entre ellos, el jefe del Estado Mayor, Benny Gantz, el ministro de Defensa, Matan Vilnai y el presidente del Knesset o parlamento israelí, Reuven Rivlin.
Otras conmemoraciones también tuvieron lugar en las principales ciudades de Israel, en la tarde del día domingo, entre Tel Aviv, Haifa, Ashdod entre otras.

El aniversario marca la muerte de 2.689 militares israelíes que dejo como resultado la guerra Israel y ejércitos árabes hace 38 años.