Los manifestantes antigubernamentales calientan motores de cara a la gran protesta del próximo lunes en Bangkok. Miles de personas han vuelto a pedir en las calles de la capital tailandesa la dimisión de la primera ministra, Yingluck Shinawatra, y la cancelación de las elecciones previstas para el próximo 2 de febrero.
Los detractores de Shinawatra amenazan con paralizar Bangkok el próximo lunes.
“Sin lugar a dudas iré el 13 de enero a las 9 de la mañana. Estoy preparada. Me quedaré allí hasta que lo logremos, hasta que Yingluck dimita. Me quedaré allí hasta que el país sea reformado”, dice una tailandesa.
Los manifestantes acusan a la primera ministra de corrupción y de ser una marioneta de su hermano Thaksin Shinawatra. El exjefe de Gobierno vive exiliado tras ser apartado del poder por un golpe de Estado en 2006.
El movimiento opositor propone la creación de un consejo popular que acometa reformas democráticas.